Un rincón del paraíso escondido

Teníamos la mejor vista desde nuestra villa sobre el agua. La experiencia de snorkel fue indescriptible, nadar con tortugas y mantarrayas era un sueño hecho realidad. Además, el personal fue extremadamente amable y atento, siempre sonriendo y listo para ayudar en todo momento.

Sin embargo, algunas excursiones resultaron ser bastante caras en comparación con lo que esperábamos. Además, la necesidad de reservar en los restaurantes populares a veces causó un poco de estrés, aunque la comida siempre fue deliciosa.

El check out fue muy apresurado, pero la villa tenía una piscina privada increíble.

recomiendo este lugar insistentemente for unas vacaciones de fin de semana,

maravillosa villa, increíble comida, pudimos disfrutar de un entorno relajante en la piscina privada justo en el océano y experimentar la excelente oferta gastronómica con un buffet variado y delicioso que incluía platos tropicales frescos, además de disfrutar de las actividades como el snorkel con el equipo de cortesía disponible en la habitación.

No podría haber ido mejor

La ubicación es simplemente espectacular, con acceso directo al agua y unas vistas impresionantes. El personal es excepcional, siempre atento a nuestras necesidades. agradecemos especialmente a Ismiel y a su equipo del restaurante, quienes hicieron de nuestras cenas una experiencia memorable. La villa sobre el agua era cómoda y tenía su propia piscina privada, perfecta para relajarse después de un día lleno de actividades como snorkel y kayak. La variedad de instalaciones, incluyendo el equipo de snorkeling y las bicicletas para recorrer la isla, añade mucho valor a la experiencia.

La reserva en ciertos restaurantes es recomendable, ya que a veces pueden estar completos.

Las transferencias en hidroavión pueden ser problemáticas, pero la experiencia en la villa es impresionante

increíble vista, comodidad excepcional, atención irregular.

Experiencia Inolvidable en el Paraíso

Estuvimos alojados en una villa sobre el agua con piscina privada, donde el acceso directísimo al arrecife nos permitió practicar snorkel a cualquier hora. La agua era tan clara que podías ver la vida marina justo debajo de tus pies. El buffet era increíblemente variado y los tres restaurantes ofrecían opciones deliciosas, especialmente la experiencia en el Beru Bar. El personal fue increíble, siempre dispuesto a ayudar y hacer que nuestra estancia fuera aún más especial. Como mejora, consideraría que algunos precios, como en el Spa, son un poco altos, pero la calidad de los tratamientos es indudable.

la piscina privada tiene vistas espectaculares al océano. una mejora sería la variedad de menú.

La villa sobre el agua con piscina privada era espectacular, con vistas impresionantes del mar azul. La experiencia de snorkel fue increíble, pudiendo acceder al arrecife directamente desde la villa a cualquier hora del día.

Sin embargo, la cantidad de bicicletas en la isla es limitada, lo que puede ser un inconveniente si otros huéspedes toman la que necesitas. podría mejorarse la comunicación de las actividades del spa. preferiría recibir esa información por WhatsApp junto con las otras actividades disponibles.

El acceso directo al arrecife desde nuestra villa sobre el agua fue increíble. hacer snorkel entre peces de colores es una experiencia que no se olvida. La comida fue excepcionalmente sabrosa y variada, se nota el esfuerzo en cada plato. Sin embargo, la reserva en algunos restaurantes puede ser complicada ya que se llenan rápido. Uno de los puntos a mejorar es que el check out fue algo apresurado, aunque la villa en sí era magnífica y perfectamente equipada.

La experiencia en Standard, Huruvalhi Maldives fue increíble. Desde la Ocean Villa con su piscina personal hasta la maravillosa comida del bufet, cada detalle impresionó. Nadé con tortugas y exploré un colorido arrecife. Aunque las excursiones son costosas, la experiencia vale totalmente la pena.

una experiencia increíble con snorkel espectacular y atención excepcional del personal en la isla más hermosa del mundo

Desde la impresionante villa sobre el agua hasta la atención inigualable del personal, me sentí como en casa. Disfruté de cada momento, especialmente del acceso directo al arrecife, donde pude hacer snorkel. La comida era variada y deliciosa, y los cócteles en el bar eran un verdadero placer. Sin duda, recomiendo explorar el huerto del hotel y disfrutar de sus productos frescos. Cada rincón del resort tiene magia, lo recomiendo con todo mi corazón. ¡Quiero volver ya!